Justicia La novela tras la intempestiva salida de la fiscal de hierro

26.04.2014 15:19

Martha Lucía Zamora estaba encargada de casos como el de Luis Andrés Colmenares y Sigifredo López.

El comienzo de año marcó un distanciamiento entre el fiscal general, Eduardo Montealegre, y la fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia Martha Lucía Zamora, quien hasta ese momento era una de las personas de confianza del jefe del ente acusador.

El anuncio esta semana de la salida de Zamora sorprendió porque había sido encargada de enderezar investigaciones delicadas, como el caso Luis Andrés Colmenares cuando estaba en un momento crítico. La abogada volvió a la Fiscalía en la época de la entonces fiscal Viviane Morales luego de haber sido relatora de la Asamblea Nacional Constituyente, asesora del Ministerio de Justicia y procuradora Delegada para la Casación Penal.

Fuentes en la Fiscalía señalaron que Zamora, que por decisión de Montealegre estuvo al frente de casos clave como el de Sigifredo López y la nueva fase en la investigación por el caso del Palacio de Justicia, pasó de ser una funcionaria cercana al Fiscal General a una investigadora que ni siquiera era recibida en el despacho.

El contacto de Zamora en los últimos meses se limitó a reuniones con el vicefiscal Jorge Fernando Perdomo. Las diferencias se empezaron a agudizar cuando la funcionaria no fue tenida en cuenta para conformar un equipo de expertos que se reunían casi a diario con Montealegre para sacar adelante la reestructuración de la Fiscalía.

Las mismas fuentes cuentan que el fiscal Montealegre le hizo un duro reclamo a Zamora hace un mes por falta de resultados en la Unidad Delegada ante la Corte Suprema de Justicia, que era coordinada por la funcionaria, y de hecho hace un par de días la notificaron que ya no ocuparía ese cargo.

En los pasillos de la Fiscalía se escucha que de fondo había un malestar por las supuestas reuniones que supuestamente Zamora sostenía con la exfiscal y hoy electa congresista Viviane Morales.

"Se escucharon muchas voces de la molestia que tenía la fiscal Zamora por salir de la coordinación de la Unidad Delegada y había incomodidad en la cúpula porque ella no entró en la política de priorización", indicaron algunas fuentes.

Sin embargo, personas cercanas a Zamora afirman que ella presentó a tiempo las tareas para priorizar los casos y que impulsó varios procesos entre ellos investigaciones contra generales investigados por su presunta responsabilidad en 'falsos positivos'.

"Es cierto que el Fiscal no la volvió a recibir y eso dificultaba la toma decisiones en investigaciones importantes que estaban en la Unidad Delegada", señalaron fuentes del ente investigador.

Otro de los capítulos que salieron a flote en la crisis fue el enfrentamiento entre la fiscal Zamora y el exdiputado Sigifredo López. Por Twitter, la funcionaria le recomendó una crema para las quemadas a López, que acababa de ser vencido en las urnas en su aspiración al Congreso. Eso generó una reunión de la cúpula de la Fiscalía en la que se planteó la molestia por ese episodio.

"Ella era un rueda suelta, no informaba de sus decisiones y manejaba su propia agenda con los medios", indicaron funcionarios. Pese a eso, personas cercanas a Zamora dicen que si no informaba era porque no había contacto con Montealegre.

Aunque Zamora había planteado la posibilidad de terminar el caso Colmenares, el vicefiscal Perdomo le hizo saber que la renuncia se hacía efectiva a partir del próximo jueves, primero de mayo.

Zamora es considerada una de las fiscales más eficientes del ente acusador y llegó a ser Fiscal General encargada en la transición entre Viviane Morales y Eduardo Montealegre.

Además, fue magistrada auxiliar de la Corte Suprema de Justicia, en donde lideró investigaciones sobre la llamada parapolítica. En su despacho en la Fiscalía estuvieron casos tan sonados como la investigación por el proceso 8000.